A semanas de ser rescatado de las aguas del río San Pedro, Víctor Cuevas Ovando agradece labor de bomberos.
El laguino de 32 años recuerda que, pasadas las 18 horas del pasado 7 de julio, mientras se encontraba bajo el Puente Mecano, se le acercaron dos desconocidos quienes de pronto, sin mediar motivo alguno, lo empujaron al río huyendo del lugar.
Desde ese instante comenzó la odisea por sobrevivir y al ver que rápidamente era arrastrado por el fuerte caudal comenzó a gritar y pidiendo ayuda. Fue en eso que un botero lo escuchó y llamó de inmediato solicitando colaboración a Bomberos y Carabineros.
Víctor contó a Diario Laguino que "cuando me llevó la corriente río abajo en Las Lajas me atrapó un remolino, ahí pensé que me iba a morir no más, ya no tenía fuerzas, había nadado harto, ya casi no sentía mi cuerpo con esa agua tan helada".
Recuerda que de pronto "divisé una mancha de mimbre (quilas) y me agarré, estaba muy cansado, miraba para todos lados y en eso vi que los bomberos se acercaban para ayudarme y me sacaron...Cuando los vi llegar me volvió el alma al cuerpo. Si no hubiera sido por ellos, hubiera muerto tratando de salir del río".
BOMBEROS AL RESCATE
Cristián Vidal, comandante del Cuerpo de Bomberos de Los Lagos, estuvo al mando del rescate esa noche.
Recuerda que recibieron la llamada de una persona alertando que alguien pedía ayuda desde el río. "Inmediamente se activó la Unidad de Rescate Subacuático de la Terceraa Compañía que ingresó al agua a la altura de calle Serrano", rememora.
Al mismo tiempo - recuerda - unos 20 voluntarios se fueron hacia abajo por la orilla del río.
Vidal relata que la experiencia y conocimiento del río por parte del Grupo Gersa, pronto a cumplir 10 años, fue clave para dar con el hombre, quien estaba exhausto y con principios de hiptermia aferrado a unas ramas, con el cuerpo semisumergido.
"Es gratificante para bomberos participar de un rescate con final feliz", recalca el oficial, junto con confirmar que el hombre tuvo fuerza y fortuna para mantenerse vivo tras el trayecto de casi cuatro kilómetros que se mantuvo flotando.
JUNTO A SU ABUELITA
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Víctor Cuevas vive junto a su abuela Rosa Barrientos, quien también manifestó estar muy agradecida del trabajo de la institución bomberil. "Ellos hacen una linda labor y no solamente por motivos de incendio, sino de accidentes, y rescatar a mi nieto fue un milagro, estoy muy agradecida se movilizaron rápidamente. Dios los bendiga por tan linda obras que hacen todos los bomberos".
Investigación y reporte de Elba Ríos.
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