Ya sean libros, películas, series o documentales, la Segunda Guerra Mundial, a más de 70 años de su fin, sigue alimentando la curiosidad de millones de personas alrededor de todo el planeta y nosotros no somos la excepción
La conexión es evidente: Valdivia era, junto con la cuenca del Lago Llanquihue, el principal núcleo de inmigración alemana en Chile llegada durante el siglo XIX y algo del XX. Esta comunidad, lejos de disgregarse y diluirse en el contexto de un nuevo país, se fortaleció por medio de una serie de instituciones como el Colegio Alemán, la Iglesia Luterana o el Club Alemán de Valdivia (hoy Club De La Unión).
OTROS TIEMPOS
Como sucede a menudo en estos días, es demasiado fácil juzgar un determinado momento histórico con la ventaja que nos da el paso del tiempo. Hoy, por ejemplo, nos parecería indignante el presenciar la escena de la fotografía, sin embargo, en aquellos años el miedo al comunismo, la buena fama de la colonia alemana en la región y el desconocimiento de los hechos que ocurrían en Europa por falta de medios de comunicación, generaban cierta tolerancia a estas prácticas por parte de los valdivianos.
La fotografía de este reportaje muestra la celebración del cumpleaños de Adolf Hitler el 20 de abril de 1937 en el Club Unión Alemán de Valdivia. En ella se pueden apreciar los retratos de Hitler, banderas con esvásticas y banderas chilenas.
AUGE DEL NACIONALSOCIALISMO EN VALDIVIA
Según relata el historiador Joaquín Fermandois, “en su gran mayoría, la colonia alemana estuvo con el Tercer Reich, pero a mi juicio sin diferenciar régimen y gobierno”. En este sentido, la participación en actividades como desfiles y celebraciones de cumpleaños de Hitler no eran extrañas.
Se formaron además periódicos y asociaciones como la Jugendbund (liga juvenil), que promovían la defensa de los valores y la sangre alemana. Además, las distintas comunidades alemanas del sur hicieron lobby para evitar que Chile tomara partido por los Aliados.
La idea detrás de este esfuerzo era que ellos mismo pudieran seguir comerciando con Alemania y que submarinos germanos pudieran seguir navegando por costas chilenas en busca de barcos que hundir.
EL ESTADO INTERVIENE
Uno de los primeros síntomas de que la relación entre el Estado de Chile y la comunidad alemana que apoyaba a Hitler se empezó a resquebrajar, fue cuando el Gobierno ordenó la clausura de la Jugendbund (Liga Juvenil) de Valdivia.
Dicha decisión fue tomada tras conocerse que había habido manifestaciones contra el casamiento de chilenos de sangre alemana con chilenos. El comunicado de clausura argumentó asimismo que se hacía propaganda política nacionalsocialista y que su Jefe, Addo Schwarzenberg, había declarado, entre otras cosas, que los chilenos eran de “calidad inferior”.
Por otra parte, Gabriel González Videla era un “pro aliado” declarado y la presión de las potencias en guerra se intensificó para que este tomara partido.
Finalmente, y sólo en 1943, Chile le declaró la guerra al Eje compuesto por Alemania, Italia y Japón, llevando a su fin y proscribiendo toda actividad nazi en el sur de nuestro país.
Fuentes: http://historiadevaldivia-chile.blogspot.com/
Fotografía: https://www.enterreno.com/
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